El lenguaje plástico es una manera de manifestar sentimientos, conocimientos y experiencias a través de diversos materiales y técnicas artísticas.
Este modo de comunicarse permite experimentar y crear una forma personal de comunicación.
Por otra parte, favorece el control muscular y el perfeccionamiento de la motricidad, tanto gruesa como fina, desarrolla las capacidades sensitivas, de observación, de atención y de concentración.
También posibilita la adquisición de nociones espaciales y una adecuada estructuración del espacio.
Por eso, es muy importante utilizar el juego para realizar actividades plásticas en los primeros años de escolarización.